Hola a todos!
Nuevamente nos encontramos para recorrer juntos este ciclo lectivo; de a poco se irán desplegando las propuestas que nos permitirán realizar experiencias enriquecedoras y que tiendan a la mejora de la formación en esta institución.
Al igual que el año pasado, el debate y uso de las Nuevas Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) será uno de los ejes de trabajo.
En esta línea, el CAIE participa de un proyecto de investigación que actualmente se desarrolla desde este Instituto Nº26 y que busca conocer la calidad de la relación que alumnos y docentes tienen con las TIC.
Los invito a sumarse con opiniones, preguntas, ejemplos, etc. a partir de estos dos problemas afines:
- ¿Cómo se relacionan docentes y alumnos, en las prácticas docentes de los Institutos de Fomación, con las nuevas tecnologías?
- ¿De qué manera se pueden incorporar las TIC a las propuestas curriculares de las carreras de los Institutos de Formación?
3 comentarios:
Creo que la relación con las tics en la Formación Docente es despareja, teniendo en cuenta, además, que las tics involucran desde la televisión, el cine y el video, a las computadoras y de ahí a internet. Se proyectan videos (como motivación, como apoyo de contenidos), se utiliza el procesador de texto, se pueden establecer contactos por correo electrónico y no mucho más. Sin desconocer, por supuesto que hay experiencias en otros sentidos, aunque son aislados.
Va la segunda parte de la respuesta.
El cómo es muy extenso -más de lo que admitiría un blog-, pero lo esencial es la creación de un entorno que favorezca el aprendizaje con (y de) las tics.
Cómo se relacionan docentes y alumnos, en las prácticas docentes de los Institutos de Fomación, con las nuevas tecnologías?
Desde mi perspectiva, creo que no existe interacción entre docentes, alumnos y nuevas tecnologías, salvo excepciones. En la mayoría de los casos la utilización de estas tecnologías se aplica en la búsqueda de información y la utilización de algún programa “Vacío”.
La política educativa pone de manifiesto la necesidad de acortar la “brecha digital” entre los jóvenes y adultos de distinto nivel socioeconómico. Pero esta brecha digital va más allá de la habilidad de operar una computadora, implica brindar los conocimientos para que puedan utilizar esta herramienta estratégicamente, independientemente del nivel socio económico del individuo.
Acortar la brecha digital implica crear en los alumnos habilidades digitales, es decir, qué puedo lograr o construir con ellas, cómo puedo utilizarlas estratégicamente, es una cuestión que no se logra sólo con el saber operar las computadoras y las conexiones de red y esto requiere de una formación del docente.
La relación entre docentes y alumnos se encuentra implícita en la interacción entre alumno y programa (diseño del software).
“La interacción diseñador/alumno condiciona el tipo de interacción entre el usuario y el programa, que varía mucho si se realiza de forma autónoma o dentro de un contexto formal. La interacción profesor/alumno, tiene que ver con los tipos de actividades de clase que promueve el programa informático. La interacción diseñador/profesor está caracterizada por la forma en que el programa supone que ha de actuar el profesor.” (Gros Salvat, Begona en el “El ordenador invisible; 2000).
Considerando la intervención del docente frente a las prácticas del alumno, podemos resumirlo en tres casos:
- Caso 1: El alumno actúa de forma autónoma frente a un determinado programa, aprende del ordenador y el profesor no tiene por qué intervenir. Puede ser una situación de autoaprendizaje y el proceso es controlado por el programa, que ayudará en el caso de errores y marcará el progreso del alumno.
- Caso 2: El profesor está presente cuando se produce la interacción entre el programa y el alumno. En este sentido, puede intervenir en cualquier momento, aclarar dudas sobre el contenido, manejo del programa, errores cometidos, etc.
- Caso 3: El programa se integra en el aula siendo utilizado por más de un alumno a la vez de forma cooperativa o competitiva (en función de la decisión del profesor). El docente que las actividades se resuelvan primero en papel, se discutan y luego se llevan a la computadora.
En todos los casos para que el uso del ordenador en la enseñanza sea exitoso se deben tener en cuenta dos aspectos: en primer lugar, los docentes deben planificar la ejecución y hacerla coherente a su práctica habitual, y segundo, los alumnos deben tener claros los resultados del aprendizaje.
• ¿De qué manera se pueden incorporar las TIC a las propuestas curriculares de las carreras de los Institutos de Formación?
Este es un tema amplio, trateré de resumirlo en lo siguiente:
El objetivo de incorporar las TIC en las propuestas curriculares es el de utilizar el ordenador como herramienta mediadora en el proceso de aprendizaje y no como objeto en sí mismo.
Teniendo en cuenta la amplia disponibilidad de productos informáticos existentes en la actualidad, es necesario evidenciar algunas diferencias generales en cuanto a la finalidad de uso.
Se pueden distinguir cinco tipos de productos:
- Instructivos: destinados a transmitir un determinado conocimiento. Ejemplos: tutoriales y simuladores.
- Acceso a la información: Programas que permiten acceder a bases documentales y de información. Ejemplos: enciclopedias, bases de datos, páginas web de Internet.
- Creación: No contienen un contenido específico. Proporcionan herramientas para la creación. Ejemplos: Logo, programas de diseño gráfico, tratamientos de textos, etc.
- Desarrollo de estrategias: Programas centrados en aspectos procedimentales. Ejemplo: juegos, estrategias de resolución de problemas, etc.
- Comunicación: Programas para el uso de redes de comunicación. Ejemplo: acceso a foros, correo electrónico, documentos en línea, etc.
Incorporar alguna de estos recursos en las propuestas no es tarea fácil por cuanto su selección y utilización depende de muchas variables, entre ellas:
- Finalidad educativa.
- Objetivos educativos previstos en el programa.
- Estrategia didáctica que se desarrollará con cada uno de los recursos.
- Tiempo de utilización.
- Grado de dificultad del producto.
El rol de los docentes no es tanto “enseñar” unos conocimientos que tendrán una vigencia limitada y estarán siempre accesibles, sino ayudar a los futuros profesores a “aprender a aprender” de manera autónoma en una cultura del cambio constante y promover su desarrollo cognitivo y personal mediante actividades críticas y aplicativas que, aprovechando la inmensa información disponible y las potentes herramientas TIC, tengan en cuenta sus características (formación centrada en el alumno) y les exijan un procesamiento activo e interdisciplinario de la información para que construyan su propio conocimiento y no se limiten a realizar una simple recepción pasiva-memorización de la información.
A partir de estas consideraciones se comprende que para integrar y utilizar con eficiencia y eficacia las TIC el formador necesita una buena formación técnica sobre el manejo de estas herramientas tecnológicas y también una formación didáctica que le proporcione un "buen saber hacer pedagógico" con las TICs.
Liliana C. Molina
Lic. en Informática Educativa
Docente del I.S.F.D. N° 22
Olavarría
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